El albergue de transeúntes sigue recibiendo a personas sin hogar en situación de exclusión y está completo al 100 por cien. El presupuesto con el que ha contado este año alcanza los 200.000 euros, 15.000 más que el pasado.
Gestionado por Cáritas Diocesana, el albergue de transeúntes queda ocupado por varones españoles. De las personas atendidas en estancia temporal, la mayoría ha permanecido una media de 15 días, ya que muy pocos transeúntes han superado el mes de estancia.
Debido a la crisis económica actual se está notando un incremento de ingresos en el albergue de transeúntes, llegándose a completar el 100 por cien de las plazas. El aumento, en este caso, no se refiere a pernoctaciones, ya que la mayoría de la gente sigue yendo a dormir a sus casas. Pero, los que acuden al albergue suelen reclamar desayunos, comidas y cenas.
El año pasado un total de 1.645 personas pasaron por el albergue de transeúntes, donde se dieron un total de 72.000 servicios entre desayunos, comidas, cenas y pernoctaciones. Destinado a personas transeúntes que se han cambiado de ciudad y no tienen hogar o que se van a incorporar con dificultades al mundo laboral, a toxicómanos y enfermos mentales, el albergue de transeúntes pretende desarrollar sus capacidades y ayudar a superar sus problemas específicos.
En el albergue duermen cada día alrededor de 40 personas y se da de comer a unas 90. El objetivo de Cáritas con este proyecto es evitar que existan transeúntes. Para ello se ofrecen servicios de acogida, de manutención, alojamiento, ropero y lavado de ropa.
Aún con la recesión actual, María José Abajo ha afirmado que no se va a recortar el presupuesto del Ayuntamiento hacia este albergue de transeúntes, sino que puede llegar hasta a “reforzarse”, aunque de momento, se va a continuar con la misma ayuda económica.
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